Adivina, adivinanza, ¿ qué contiene esta máquina expendedora...? ¿Dulces y chocolates?, ¡nooo!, ¿Bebidas?, ¡nooo! Contiene medicamentos, sí, lo que oyen, ahora ni siquiera hace falta ir a la farmacia, si tienes algún problemilla de salud, quizá te puedas surtir en el metro más cercano...

Para los que aún no lo sepan, este año me ha tocado vivir con un tormento llamado Macu. Ambas decidimos venir a estudiar a la tierra equivocada. La calidez y la exuberancia generan tantas ganas de vivir que palabras como "investigar" o "estudiar" casi suenan a sacrilegio... En nuestras "horas muertas", es decir, en nuestras "horas vivas", nos dedicamos a observar con humor todo lo que nos rodea y a inventar comics que luego pegamos en nuestro "escapadarte", situado en la pared de la cocina, jijiiji. Como buenas gamberras, de quien más nos reímos es de nosotras mismas. Aquí les presento nuestra primera obra de arte: "Soficu y Macufi entre merengues"y una foto de Macufi con la prenda de amor que le regalé para sellar nuestra conviviencia...